Si silenciamos nuestra mente, y entramos a ese lugar donde existe TODO y NADA a la vez. Si entramos dentro de esa burbuja, suspendida en el aire, que es la MENTE EN PAZ, nos daremos cuenta que la vida tiene su vaivén, su ritmo que aunque parece caotico, no lo es.

Es una callada sinfonía, con instrumentos de alta y baja vibración, que al parecer por separado, son «buenos» y «malos», pero que si se oyen dentro de esta burbuja suspendida, entre el espacio que dejan las emociones y pensamientos al callar, podemos de verdad, oír la bella música y sonreír a su ritmo.

Es una prodigiosa pieza musical que termina solo con la eventual Iluminación del alma.

Ana Montero
Instructora de Meditación de Atención Plena y Terapista Contemplativa en Toronto Canada.