Las 6 cosas que Aprendí en el 2013

chinese-celebration-❀Aprendí que estamos separados el uno del otro, por (nada mas) que un Ego nebuloso. Este Ego tiene pinta de brea solida pero no lo es. Como una nube tan gris y oscura, que parece grasa negra, gruesa y pegajosa, pero que no lo es. Solo que al tomar la decisión de ser vulnerable, de abrir la neblina con las manos, de soplarla con tu boca, y se desvanece y puedes pasar hacia adelante, a pegarte a mi y a ti y a todos. En completa entrega y confianza, los recuerdos de esta separación, se hacen mas y mas débiles. La intimidad de la Compasión es un Tango, que con ritmo intuitivo, nos juntamos en completa aceptación.

❀Aprendí que en la Vulnerabilidad, y delicadeza de Corazón, se encuentra la fortaleza mas grande que ha existido. Solo con el corazón roto en mil pedazos, sosteniéndonos estables en el dolor, somos mas avanzados en nuestra Humanidad. Que si vemos nuestro dolor y compasión hacia otras personas, como una tabla de correr olas, listos, orgullosos, diestros en el balance, podemos tener el poder de muchos superhéroes. Quiero que seas mi Superhéroe, que con tu valentia vengas y no me salves de morir, si no que me acompañes mientras muero.

❀Aprendí que el sentir Compasión por otros seres humanos es difícil para un gran número de personas. Que es como un planeta sin descubrir, miserioso y amenazante. Es como el dolor de parto, con la fuerza de la potente contracción, queremos que venga y que no venga. Queremos y no queremos. Por que duele mucho el sentir el dolor de otra persona. Y por que cuando lo sentimos, ya no hay marcha atráz. Una vez envueltos, y no hay manera de desenvolvermos. Una vez que siento tu dolor y sufrimiento, en mi carne y célula, serás por siempre parte de mi. Y aún cuando mi cuerpo yace bajo metros de tierra, todo lo vivido y sentido en esta vida, sale como aceite esencial de Clary Sage, fragante y purificador, para encontrarse con las raices de tu mundo.

❀Aprendí que si tienes el bienestar de otros seres humanos en la palma de tu corazón, como brújula, como barco de madera estable en una tormenta, nuestros sueños aunque grandes, gigantes y ridículos, se hacen realidad, simplemente por que no tienen otra opción mas que materializarse en esta dimensión. El otro mundo detrás de este, esta a la espera, ansiosa y contagiante, de los nacimientos de los sueños que alivian el sufrimiento de todos nosotros. Como generosa, rica e inocente ONG, esperando las aplicaciones de proyectos, donde nos beneficiamos todos, hoy, ahora y siete generaciones mas.

❀Aprendí que la verdadera revolución empieza con nosotros mismo, siempre y primero. Que empieza el momento que encontramos dentro de la quietud y silencio, la medicina que hemos estado esperando. En la Presencia existe la Revolución. En la Presencia existe la Sanación. Por que el estado de meditación de consciencia plena, es el estado de la Compasión. Meditar es Aceptar. El Aceptar es Amar. El amar es la acción alerta de la Compasión. No hay nada mas extraordinario que vivir. Que ponchar tarjeta en esta vida que tenemos, por destino o coincidencia. De respirar, sabiendo que respiramos, de cada momento en momento, sin importar si hay vida eterna o si dejamos de existir luego de la última respiración. La presencia es la definición de Revolución, por que al estar Presentes, estamos 100% libres.

❀Aprendí que es de suma importancia que regresemos en masa y retomemos el rol de guardianes de la muerte de nuestros seres amados. Mi muerte no le pertenece a ningún doctor, a ningún abogado, a ningún hospital, y menos al Estado. Mi muerte me pertenece a mi primero, y luego a la gente que me ama y quiere lo mejor para mi. Mi muerte es un evento familiar y comunitario y tu muerte también lo es. Debemos ayudarnos a crear un cuerpo de conocimiento, añadiendo a lo que ya se sabe, para mejorar nuestro cuidado contemplativo al final de la Vida. Tenemos que tener coraje, y decir: No gracias, me llevo a mi madre/padre/hijo/tio/sobrina a nuestra casa, a que muera en Paz. No más maquinas, ni invasiones, ni extraños. Nuestra Muerte es nuestra y es nuestro seno donde debe respirar su último aliento. Nuestra Muerte es nuestra manera de Vivir. Que nuestra Vida, nos pertenezca a nosotros y solo a nosotros.

Que el 2014 sea el año mas vulnerable que hayas tenido. Por que es en la vulnerabilidad donde hay conexión con otras personas. Es en esa incomodidad sostenida, con coraje y valentía, donde vive la Evolución Espiritual. Y eso es lo que deseo para ti, crecimiento y evolución, para que dejes de sufrir, para que vivas feliz, y para que asistas a otras personas en obtener eso que tanto anhelan.

Que el 2014 sea el año mas incomodo y vulnerable que hayamos tenido, eso quiero para mi y para ti, de todo corazón.

Ana Montero

Testimonios del programa EL ARTE SAGRADO DE MORIR

ambardelalma tanatologia

 

«Ana, palabras son pocas y no me alcanzan para agradecerte, tu tiempo, tu calidez, tu sabiduría, tu ternura, tu compartir… El despertar en mi, interes por la aceptación de la muerte que es parte de la vida. Por sacarme el corcho del cerebro, por enseñarme otro camino, por seguir apoyándome en mi camino de limpieza de mi corazón y mis sentidos. Para mi Tanatología es vida…este taller ha sido Vida mas que Muerte. Gracias, gracias gracias!» I. Campo Garcia de Lima.

«Ana Montero transmite la belleza en el cambio que supone la muerte. Me gustó explorar el como crear magia entorno a la muerte, saliendo del miedo que produce la muerte»

«La sencillez no esta reñida con la profundidad. El Arte Sagrado de Morir, ayuda mucho a prestar atención a esas «pequeñas cosas» que hacen grande la vida y la muerte»

«Muchas gracias Ana: Me has ayudado mucho a reencontrarme. A amar y ser consciente de la muerte. A amar con mucha mas Sabiduría y Compasión. Te valoro mucho. Gracias.» Claudia de Lima.

«Las practicas y métodos  enseñados en El Arte Sagrado de Morir han sido muy utiles e interesantes. Me gusto recordar a mis abuelos en el ritual al final del taller, pues nunca lo hice antes»

«Gracias por la calidez, Ana! Aprendi que se puede y se debe hablar de la muerte con la persona que se va, si ellos deseas. Aprendí a perderle un poco el temor a ese momento. Aprendí a que la muerte puede ser un transito hermoso y sublime».

«Aprendi a mirar la muerte como parte de un proceso inevitable. Aprendi la importancia de los gestos y detalles que hemos de tener con quien ya esta apunto de partir. He salido muy satisfecha y reconfortada del taller El Arte Sagrado de Morir.»

«Me gusto revivir el acompañamiento de la partida de mi mamá y todo lo que nos has compartido encaja en este proceso vivido. GRACIAS, ANA!»

«Querida Ana: Gracias por entregarnos conocimiento, amor y humildad, por enseñarnos a hacer y a hablar con amor y creatividad, por mover nuestras fibras mas ocultas».

«Soy un ente de protección y facilitacion en la transicion del Sagrado Arte de Morir. Gracias Ana por ayudarme a tomar conciencia de esto.»  Belisa O.

«Gracias por todo tu Amor, Entrega y Respeto. Tu Sabiduria y Humildad es el mejor regalo de la vida. Bendiciones, Ana!».

«Me llevo un valioso aprendizaje, de dar amor, y protección hasta el ultimo respiro que alguien puede tener en este mundo. Este conocimiento no tiene precio, pocas veces uno habla con tanta naturalidad de la muerte. Gracias, gracias, gracias!»

«Este taller El Arte Sagrado de Morir deberia ser un taller que todas las personas que trabajan directamente con la persona que muere en clinicas y hospitales, como doctores y enfermeras, deberian llevar.»

Poster Arte Sagrado Talleres Horario

Las Cadenas de la Avaricia

avariceEs fácil pensar que somos personas generosas y magnánimas cuando leemos sobre la avaricia. Pensamos:
«No estoy enganchado a las cosas materiales. Soy feliz al compartir lo que tengo con otras personas.» Pero si alguien nos preguntara:» Puedo tener toda la comida de tu cocina?» Probablemente responderíamos: «No!, Por que te la tendría que dar a ti?» O si alguien se llevara nuestros zapatos, nos molestaríamos muchísimo «Quien se llevo mis zapatos? Como se atreven! Que me los devuelvan!».

Detrás de nuestras excusas esta el miedo. Creemos falsamente que nuestras posesiones nos darán seguridad en esta existencia cíclica. Pero la verdad es que, nuestro enganche hacia estas posesiones nos amarran a la PRISION DE DE-SATISFACCIÓN. Constantemente deseamos MAS Y MEJOR, y nunca estamos satisfechos con lo que tenemos.

Bhikshuni Thubten Chodron (Traducido por Ana Montero)

El estudio de La Generosidad es una de mis practicas espirituales principales. Me gusta estudiar como se siente ser generosa, como ser generosa, como se recibe la generosidad, lo incomodo de la generosidad, los cambios comodos e incomodos fisicos que trae la generosidad, etc. El desarrollo de la Generosidad no es en el compartir o dar lo que deseamos y es comodo dar (aunque eso es muy bueno), si no en el retarnos, en dar cuando es incomodo y nos da miedo. Eso expande nuestros limites y crea caminos neurologicos en nuestro cerebro. Se vuelve mas y mas facil despegarse de nuestras cosas.
Esta práctica no es solo para las cosas materiales si no, el dar generosamente de cualquier estado cómodo en el que estamos, por ejemplo el dar nuestro asiento a alguien que lo necesite AUN si estamos cansados, o somos mujeres o somos mayores, etc.

La Generosidad Vive en la Incomodidad.

Hoy, da algo de ti, material o de acción, que te duela un poco, que te incomode un poco. Dálo con amor, desapego, gratitud por tenerlo y poderlo dar. Investigando en cada segundo como se siente al darlo y las horas despues.

Que estes bien.

Ana Montero. Instructora de Meditación de Atención Plena. Toronto. Talleres en Lima, Peru, ponte en mi lista, escribeme a adamantinehealer@yahoo.com

Sobreviviendo la Marea.

Ocean stormA veces la vida es como un océano revuelto en el que nos encontramos sin saber por que. Tratamos en vano de avanzar, de nadar y llegar a la orilla para descansar y creernos salvados.
Pero la Salvación se encuentra solo en el momento. En ese momento del va y viene, del respiro limpio, del dejarse ir. Del no pelear en contra la corriente y quizás nadar paralelo a la orilla.
La victoria se mide, no al llegar a la orilla.
Se mide en cada segundo que respiramos y estamos conscientes de que respiramos.
Y también se mide, en medio todo el miedo e incertidumbre, en encontrar lo bello del mar y en el placer que nos da con sus apasionadas caricias.
Maravillemonos hoy, de nuestra capacidad para flotar.

Con amor,

Ana Montero.