En el immenso conjunto de enseñanzas Budistas, se encuentra una llamada LA SEGUNDA FLECHA. Que es exactamente la segunda flecha, te preguntaras. La segunda de que primera?
La primera flecha es el dolor que sucede en un evento, cualquiera que sea. Las personas que no están «despiertas», o entrenadas a analizar ese dolor, automaticamente sufren, lloran, se jalan los pelos, se postran, y sienten un sufrimiento profundo. Sea este sufrimiento ligero o muy muy profundo, este sufrimiento es parte de una reacción indisciplinada, una de las muchas en nuestras vidas.

Ese sufrimiento es LA SEGUNDA FLECHA. LA PRIMERA fue el dolor de la muerte de alguien querido, la enfermedad, el despido del trabajo, un golpe, etc.

Imagina un niño de dos años, recién empezando a conocer el mundo. Imagina que le das a ese niño un juguete muy bello y sus ojos brillan de la emoción. El juguete se ensucia, y tu se lo quitas (sin explicación) y lo llevas a la cocina a limpiarlo. El niño rompe en llanto, se tira al suelo, se golpea la cabeza, se baña de lagrimas, no sabe que hacer. Tu vienes corriendo con el juguete limpio y se lo das. El niño lo recibe pero de vez en cuando sigue lloriqueando…suspirando.

Nosotros somos ese niño, en nuestra inhabilidad de darnos cuenta que el dolor de la quitada del juguete es solo eso. Nos quitaron el juguete. Quizás el juguete regresará, quizás ya no, pero fue lindo jugar con el. Pero nosotros sufrimos aun cuando el juguete paso a la historia.
El juguete que se nos fue es la Primera Flecha, pero el sufrimiento, los golpes de cabeza, los gritos y suspiros son la Segunda Flecha.

Por que nos hacemos esto? Hay manera de no reaccionar así?
Si lo hay.
El primer paso es AVERIGUAR CUANDO ES EL MOMENTO PRECISO entre la Primera Flecha y la aparición de la Segunda Flecha.

Cuando aparece TU SEGUNDA FLECHA? Aparece tan rápido que ni la vez venir? Pasa un segundo, un minuto? CONOCETE. EXPLORATE. Eres el planeta mas raro y valioso en la constelación. Vuélvete un Explorador de un Terreno Desconocido!

Una vez que conoces cuando sale la segunda flecha, solo mírala, mira tu «Terrible» Sufrimiento. Así como una madre ve a su hija pequeña hacer un berrinche sin razón? Así míralo. Con amor, compasión, pero también con un poquito de sentido del humor. Muévele la cabeza un poquito. Dile: Ay, Pobrecita! Ya va a pasar (por que es verdad, ya va a pasar, nada dura para siempre)
Respira con tu sufrimiento, pero se en un lugar de tu mente que cada vez que haces eso, ya no DISPARARAS LA SEGUNDA FLECHA tan rápido, tan automáticamente.
A medida que TE ENTRENAS estas mas cerca a la Libertad Emocional y al parar de Sufrir.

Ana Montero de LA ATENCION PERFECTA: Un Consultorio de Meditación Contemplativa en Lima y Toronto. Adamantinehealer@yahoo.com